El que ves arriba es el cartel del Carnaval de Terrassa.
Realizado deliberadamente para ofender a los católicos.
Pide al alcalde su retirada inmediata.
Además, el lugar donde se presentó el póster, una cripta vacía del cementerio, con un crucifijo detrás de dos mujeres vestidas con túnicas moradas, remarca más el carácter ultrajante.
El alcalde de este municipio, exsocialista que ahora dirige un partido local, está pagando con dinero público las mofas a los católicos, que también son vecinos de localidad (y seguramente mayoría).
Pide al alcalde su retirada inmediata.
El gobierno quiere eliminar del Código Penal la protección de los sentimientos religiosos para que manifestaciones como estas salgan gratis.
Muchas gracias por defender la Libertad Religiosa.