- El OLRC pregunta a González cuáles son, según él, los temas de los que un Obispo puede hablar y le exige que pida perdón al Prelado getafense.
- Pedro Golmayo, presidente del Observatorio, recuerda que otros políticos intentaron hacer callar hace unos meses a otro Obispo madrileño, Monseñor Reig Pla.
El Observatorio para la Libertad Religiosa y de Conciencia (OLRC) apoya a Monseñor Joaquín María López de Andújar, Obispo de Getafe, y recuerda a Ignacio González, Presidente de la Comunidad de Madrid, que los obispos, como el resto de ciudadanos españoles, tienen derecho a la libertad de expresión.
Monseñor López de Andújar expresó en un comunicado su descontento con el proyecto de Eurovegas, que según el Obispo, puede llevar al sur de la Comunidad de Madrid “actividades nada deseables” como “la prostitución, el blanqueo de dinero o el consumo de drogas”. El presidente madrileño le ha retado a llevarle a los tribunales y le ha contestado que “rectifique” y se dedique “a lo suyo”.
Pedro Golmayo, presidente del OLRC, pide a González que explique “qué es, según él, lo propio de los Obispos. Parece que el Presidente de la Comunidad no deja opinar a nadie sobre los proyectos que se realizan en el territorio que él gobierna” y pregunta “por qué cree Ignacio González que temas tan morales como la prostitución, el blanqueo de dinero o las drogas no entran dentro de lo que un Obispo puede tratar”, por lo que considera que “el Presidente madrileño debe pedir perdón a Monseñor López Andújar”. “A algunos políticos les gustaría que los Obispos en particular y los católicos en general se mantuvieran calladitos, pero la libertad de expresión es un derecho para todo el mundo, no sólo para los que piensan igual”, añade Golmayo.
A este respecto, el presidente del OLRC recuerda cómo hace unos meses otros políticos de la Comunidad de Madrid intentaron acallar a un Obispo. “Los concejales del Ayuntamiento de Alcalá de Henares vetaron a Monseñor Reig Pla por explicar la moral católica en una homilía y todavía no le han pedido perdón públicamente”. “Parece que los Obispos tienen prohibido hablar de ciertos temas pero los políticos pueden decir quién debe hablar y quién no”, concluye Golmayo.